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“En estos tiempos, es necesario que los directivos y docentes tengan una visión lo más integral posible de las diferentes dimensiones de la persona humana. Educar es esencialmente ayudar a cada alumno a desarrollar al máximo todas sus potencialidades humanas”, así lo afirma Sergio Jarpa, encargado del programa de Antropología y Ética orientado a la educación donde participan 40 docentes de la RED Irarrázaval.

El Programa de Antropología y Ética aplicada a la educación consiste en abordar, a través de 8 sesiones, conceptos fundamentales en relación con la persona humana, desde el punto de vista antropológico y ético, es decir, qué es el ser humano como ser racional, sus características, los fines de la inteligencia y de la voluntad, la libertad, la sensibilidad y la afectividad, los apetitos como inclinaciones o tendencias y los valores como formas de comportamientos positivos.

Sergio Jarpa y Jorge Montes de EPI Consultores son los encargados de dicho programa junto a Grupo Educar.  El curso, según comentan, se complementa con actividades relacionadas con el contenido de cada sesión para ser trabajadas con los alumnos de los participantes del curso.

Sergio señala que este programa es importante para profesores y alumnos especialmente en estos tiempos, donde es necesario que los directivos y docentes tengan una visión lo más integral posible de las diferentes dimensiones de la persona humana. “Educar es esencialmente ayudar a cada alumno a desarrollar al máximo todas sus potencialidades humanas. No se trata, por tanto, de transmitir sólo unos conocimientos y habilidades intelectuales, sino especialmente, de prepararlos para que sean capaces de administrar bien su libertad, eligiendo todo aquello que los hace mejores como personas y, por tanto, más capaces de servir a los demás y a la sociedad.

Este Programa es nuevo por su enfoque. “Se trata de aterrizar conceptos, ideas y contenidos que habitualmente se consideran muy abstractos y complejos, dándoles una orientación educativa y práctica. Los participantes tienen la oportunidad de aplicar con sus alumnos los aprendizajes que se van entregando en cada sesión del curso”.

El curso comenzó el mes de abril, y dura hasta julio, y 40 profesores de la RED Irarrázaval fueron becados para participar en él. Para Aníbal Vial, gerente general de la Fundación Irarrázaval, la antropología y ética es de suma importancia para la labor de un profesor: “el reflexionar sobre la persona humana es clave para que los profesores puedan tener una mirada integral de los alumnos y nosotros como Fundación siempre tratamos de promover esa mirada, una mirada profunda de lo que es la persona en su integridad”.

ANTROPOLOGÍA Y ÉTICA HOY

“Creemos que es de la máxima importancia. Sin una idea clara de lo que es una persona y cómo a través de una buena educación se va desarrollando una personalidad madura y equilibrada, es muy difícil lograr altos estándares académicos y conductuales. Educar es transmitir valores en primer lugar y esta misión es primordialmente de los Apoderados y de los profesores a través, principalmente, de su testimonio personal”, afirma Jorge respecto a la importancia de educar sobre antropología y ética hoy.

Sergio afirma que los participantes se quedarán con: “una compresión integral de la persona humana; una mirada revalorizada de la importancia de trasmitir valores; y la necesidad de tener una visión compartida de las prioridades educativas por toda la comunidad escolar: apoderados, directivos, docentes, y asistentes de la educación”.

“Nos parece que podrán traspasar a sus estudiantes un énfasis más marcado en la adquisición de valores tales como la solidaridad, la fortaleza o reciedumbre, la responsabilidad, y un largo etcétera de diferentes conductas que vayan posibilitando formar, según las diferentes edades, una personalidad más madura”, señala Jorge.